24-Nov-2015
Artur Mas
oficializó este domingo la defunción de Convergència Democràtica de Catalunya
(CDC), 41 años después de su asamblea fundacional. El presidente catalán llamó
a crear "un nuevo partido" que reúna las fortalezas de la formación
que ha gobernado Cataluña durante 28 años desde 1980 "y deje de lado lo
que ya no sirve". Loscasos
de corrupción que salpican al partido, y
singularmente la caída
en desgracia de su fundador, Jordi Pujol, están
detrás de la refundación, como también lo está el proceso soberanista, que en
los últimos meses ha ido apartando de la sala de máquinas a los dirigentes más
moderados.
(Información de El País)
El triunfo
de Artur Mas
El nivel, la categoría, el prestigio de un
político, normalmente se mide por los triunfos conseguidos en su actuación, por
los triunfos que van a pasar a la historia. Pues si hacemos esa operación con
Artur Mas, los triunfos no aparecen en ningún rincón de su perfil. Mejor sería
buscar sus fracasos. Uno tras otro.
Hagamos una pequeña historia. Su carrera
política se forja a la sombra de uno de los más importantes corruptos en la
Historia de Cataluña y de España. Cuando coge las riendas de la Generalitat, sus
medidas de austericidio hunden a su región al peor de los momentos de progreso
de Cataluña. Una vez descubierta la corrupción, y su fracaso, inicia una huida
hacia adelante. Se apunta a lo que nunca fue su partido de Convergència y Unió:
el independentismo. Se apoya en partidos históricamente independentistas, y a
última hora, en partidos contrarios a su ideología. Consigue así romper con
Unió; CIU, el partido más fuerte en el
soberanismo catalán queda roto. Se inventa un referéndum esperpéntico
que sale un auténtico ridículo. Se inventa unas elecciones plebiscitarias que
lleva a fracturar la sociedad catalana. Y cuando ve que lo ha perdido todo,
decide cargarse Convergència, e iniciar la formación de un nuevo partido ¡Vaya
historia!
Julio
García-Casarrubios Sainz
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