¡QUÉ SE FASTIDIEN!

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La Educación en España

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Que les aumentan dos horas de trabajo a la semana.., ¡que se fastidien!. Trabajan 20 horas a la semana y ponen el grito en el cielo porque les ponen dos horas más. Hace bien el Gobierno en aumentarles las horas de trabajo. ¡Para lo que hacen!

Que les van a aumentar el número de alumnos en cada clase.., ¡que se fastidien! y trabajen más. ¿Qué les pongan menos alumnos? Tienen 30 por clase y porque les quieren poner 35 salen a protestar a la calle. Qué listos. Un azadón les daba yo.

Qué les bajan el sueldo un 5 %..., más se lo tenían que bajar. Para lo que trabajan, ganan demás. Más trabajo y menos sueldo es lo que tenía que hacer el Gobierno.

Perdón. Sé que muchos ciudadanos no piensan así. A ellos no me dirijo. A quienes no piensen así, solo agradecerles su comprensión, y su reconocimiento. Gracias.

Me dirijo a los que sí piensan así, de los maestros y de todos los que se dedican a la enseñanza. Y me dirijo a ellos para decirles, que los comprendo, que los entiendo. Sí. No comparto su opinión, porque están muy equivocados, pero los comprendo. Entiendo que quienes no conozcan la dificultad de la profesión, ni lo que han tenido que pasar para llegar a ella, y estén trabajando ocho horas, o más, al día, se rebele contra los docentes, maestros o profesores. Los entiendo, y hasta los disculpo.

A quienes no disculpo, es a ciertos sectores de la clase política, a ciertos dirigentes políticos, que pretenden introducir sus criterios ideológicos y economicistas, diseñando una estrategia basada en alimentar el desprestigio de los docentes, en vez de decir claramente cuáles son esos criterios, cuáles son sus motivaciones. No las dicen porque supondría un coste electoral muy grande. Tratan de cambiar el modelo educativo que tanto nos ha costado. Un modelo más barato, más privado, más selectivo, y menos universal. No lo dicen. Se limitan a enfrentar a docentes contra la sociedad. Es a ellos a los que no disculpo. Saben que no tienen razón, pero siembran esa idea para abonar el campo de sus aspiraciones; para introducir sus ideologías.