___________________________________________________
Apuntes del Siglo
XX….y XXI
___________________________________________________
Ha llegado
con retraso. Pero ¡Cómo ha llegado! Ha llegado barriendo todo lo que había en
RTVE. De un plumazo han cambiado las caras. El problema es que detrás de esas
caras hay una nueva forma de concebir la información. Si las personas que
entran nuevas después del barrido proceden de Telemadrid y de los que formaban
parte del equipo de Urdaci, en la etapa de Aznar, pues, ya sabemos que
intenciones traen. Nadie puede llamarse a engaños. Lo que no es fácil de
comprender es, ¿por qué han tardado siete meses en provocar el cambio?
Cospedal, nada más llegar, nombró nuevo director de TVCLM a Ignacio Villa,
hombre procedente de la Cope, “modelo de calidad, imparcialidad y pluralidad”.
Quizá no
encontraban el momento más oportuno. Y ha surgido ahora. Tienen que haber
pensado: señores si no ponemos remedio al desprestigio en el que estamos
cayendo, esto va cada vez más a pique. ¿Solución? Ya está. Hacemos en RTVE lo
mismo que hemos hecho en los gobiernos de Madrid y Valencia, que nos ha dado un
magnífico resultado. Hacer una televisión a nuestra medida. Una televisión
pública “que diga lo buenos que somos”. Una televisión que manipule la
información como lo hacía Urdaci, y por lo que fue sentenciado judicialmente.
Pero no importa. Nosotros a lo nuestro: decir lo que interesa y tapar lo que no
interesa.
Para la
democracia será un enorme mazazo en todo lo alto de las costillas. “Zapatero
nos ha legado nefastas herencias”, y muchas más que vamos a oír a partir de
ahora. Pero nadie puede negar que la Ley de 2006, acabó con la inercia de
cambiar los medios públicos cada vez que hubiera un cambio de Gobierno.
Habíamos logrado tener una televisión pública de calidad e independiente de
quien estuviera en el Gobierno. Pero sobre todo habíamos logrado una televisión
pública de prestigio, referencia, y fuente fiable en los medios
internacionales.
¿Y qué? “Eso
no tiene importancia” Un decreto Ley, con mayoría absoluta, deroga una Ley
anterior, y a seguir nombrando el Gobierno los cargos en la televisión pública.
¿A que dicen ahora que lo hacen porque se han propuesto acabar con una
televisión sectaria? ¿Qué lo hacen para acabar con las mamandurrias? ¿Qué se
apuestan?
No hay comentarios:
Publicar un comentario