UN MINISTRO ESTRELLA

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Apuntes del Siglo XX….y XXI

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Muchos siempre hemos criticado cuando un juez o un arbitro de fútbol pretende ser la estrella. Pero lo que no había surgido hasta ahora era la figura de ministro estrella. Ya lo tenemos. Se llama Alberto Ruiz Gallardón. Y no surge por generación espontánea. A él siempre le ha gustado ser estrella. Como el dicho popular: le gusta ser el santo en la procesión o el muerto en el entierro. Además, él sabe que en España la popularidad y la valoración van juntas. Cosa que no tiene porqué coincidir. Pero él sabe, por las encuestas, que coincide.

Es prioritario ser estrella o ser popular, para sus intereses personales. Siempre quiso ascender, y no ha dejado de intentarlo, ni lo dejará. Sin entrar en el fondo de la Ley que regula los matrimonios homosexuales, llama poderosamente la atención que un ministro de Justicia declare, que a él personalmente, no le parece inconstitucional algo que su partido lo ha recurrido ante el Constitucional. Populismo puro y duro. Estrellato puro y duro. Su persona está por encima de su partido y de su Gobierno. ¡Ojo! A mí tampoco me parece que sea inconstitucional. Pero yo no soy ministro de Justicia, ni miembro de un Gobierno del PP.