lunes, 21 de noviembre de 2011

UNIDOS AL CAMBIO


Lo primero felicitar a los ganadores. ¡Enhorabuena! El Partido Popular ha centrado su campaña electoral con el lema: “Únete al cambio”. Los populares han puesto todo su énfasis en la necesidad de un cambio. Pues sí. El cambio se ha producido como anunciaban todos los sondeos. Pero ahora toca llevarlo a cabo. Todos tienen que cambiar. Los ciudadanos le han dicho a los partidos que ya pueden ir pensando en cambiar muchas cosas. Entre otras, lograr que los ciudadanos dejen de ver a los políticos como uno de los grandes problemas de España.

El PSOE tiene que centrar su propio cambio en la elección de un nuevo líder, de unos nuevos líderes, capaces de identificarse con la sociedad española más de lo que lo ha hecho la generación de Zapatero. El todavía presidente del Gobierno y secretario general del Partido Socialista ha acertado mucho más de lo que la oposición le ha achacado, aunque esto es otro tema. Pero ha sido el responsable más directo del desencanto de sus seguidores. Es pronto para juzgar los aciertos y los errores. Es una cuestión no menos importante, pero sí menos urgente.

El cambio del PSOE debe enmarcarse en dos direcciones. El cambio de liderazgo, con honestidad, lealtad y claridad, para no caer en los errores que se cometieron cuando la sucesión de Felipe González. No puede repetir aquello, de tan nefasto recuerdo. Pero también tiene que cifrar el cambio en la redefinición de la socialdemocracia. Debe dejar muy claro que aunque a veces haya que tomar medidas contrarias a sus principios por necesidades coyunturales, no puede caer otra vez en la tentación de distanciarse del ideario socialista, desencantando a sus seguidores.

Por su parte, el Partido Popular, también debe ponerse las pilas para concretar ese cambio que tanto ha predicado durante la campaña electoral. Tiene que cambiar el chip. Ya no está en la oposición, ya no tiene como objetivo fundamental desgastar al Gobierno, porque es obvio que a partir a ahora tiene la responsabilidad de gobernar. Esperemos que no sea “la oposición de la oposición” como ha hecho la Sra. Cospedal en Castilla-La Mancha. Esperemos que no caiga en la tentación de justificar sus acciones en la herencia recibida.

Ya no vale esperar en el banquillo a que un jugador se rompa una pierna para salir al campo. Mariano Rajoy ya está en el campo de juego. Ahora le toca jugar y meter goles. Le toca ahora demostrar que todo lo prometido es capaz de cumplirlo. Le toca ahora, entre otras muchas cosas demostrar que tiene las fórmulas para crear empleo y generar confianza. Ese es su cambio. Ese es el cambio que le toca al Partido Popular. Y desde aquí nuestro deseo de que sepa llevarlo a cabo, por el bien de todos. A los demás solo nos toca felicitar a los ganadores; y a los perdedores, que sepan asimilar su derrota, y sepan acomodarse, con buen talante, en su nueva y constructiva tarea. ¿Se quedará el cambio en solo palabras estratégicas?


No hay comentarios:

Publicar un comentario