Es muy frecuente encontrar dirigentes, o simplemente miembros de base, del Partido Popular que se molesten enormemente porque se les adjudica el calificativo de herederos del franquismo. Se enfadan muchísimo, Pero luego no hacen nada por demostrar lo contrario. Y siempre que tienen ocasión se niegan a condenar todo lo que esté relacionado con la dictadura.
En estas posiciones existe una tremenda incoherencia. Son defensores a ultranza de que la izquierda abertzale condene sin paliativos los atentados de ETA. Y si no lo condenan, automáticamente los consideran pertenecientes a la banda terrorista. El argumento es válido. Pero también tiene que ser igual de válido para la condena del franquismo. Si no lo hacen no puede extrañarles que alguien los considere como los herederos de tal franquismo.
Estamos viendo con demasiada frecuencia que miembros del PP, diputados, alcaldes, que encuentra con facilidad un pretexto para negarse a borrar todo aquello que sea motivo de ensalzar el franquismo. Ayer decía un alcalde que no era necesario anular la concesión de alcalde perpetuo a Francisco Franco, con el pretexto de que como ha muerto, también han muerto los títulos que en su día se le concedieron. Perdone, pero eso es propio de un heredero de la ideología franquista.
No hay comentarios:
Publicar un comentario