martes, 14 de junio de 2011

SORPRESA NINGUNA


¿Quién se ha sorprendido? Sorprenderse ahora por la actitud del Partido Popular y en especial de su presidenta regional María Dolores de Cospedal, es un ejercicio de ingenuidad. Ahora ya no vale sorprenderse, ni siquiera quejarse. Lo que le corresponde ahora al PSOE es analizar, porqué se ha perdido, porque no se evitan estas reacciones, porque no se ponen las medidas para que una y otra vez no vuelvan a repetirse las mismas circunstancias, las mismas reacciones.

Basta tener un mínimo de observador para darse cuenta de cuales iban a ser las reacciones en el Partido Popular. De las que iban a ser y de las que van a seguir siendo. Si en un plazo razonablemente corto, en Castilla-La Mancha, la situación mejora, que no es probable, nos dirán: ¿Ven ustedes como nosotros teníamos la fórmula para cambiar? Nos dirán: el cambio era necesario lo mismo que es necesario en el gobierno central. Así seguirán pidiendo el adelanto electoral.

Si por el contrario, como es de esperar, el crecimiento económico no despega, y el paro no se reduce de forma sustancial, entonces el discurso del PP será: “Nosotros hemos puesto todo nuestro empeño en cumplir las promesas, pero ha sido imposible porque la herencia que hemos recibido es mucho peor de lo que aún suponíamos” Y ya está. Así despacharán el tema de la crisis y del paro.

Por tanto, cuando llegue ese día que no falta mucho, y que ellos lo saben, ya tendrán el camino y el discurso preparado. Porque en el PP saben que se trata de un problema muy difícil de solucionar de un día para otro. Saben que la solución del problema depende de una serie de circunstancias que aún están lejos de que se den. Así, ahora lanzando mensajes alarmistas van preparando su camino, que no va a ser precisamente un camino de rosas. Es más, saben que tendrán que tomar medidas muy poco populares. Pero no será problema, la culpa será de la herencia recibida.

Y, si el PSOE sabe perfectamente lo que va a ocurrir, que debe saberlo, ¿por qué no cambia el discurso? ¿por qué no cambia de estrategia? ¿por qué no reconoce que se está equivocando? Ya no vale lamentarse de lo malos que son en el PP. Eso no sirve de nada. No es cuestión de buenos y malos. Eso es un error. El PP es de derechas, y todos sabemos cómo actúa la derecha en España, ayer, hoy, y mañana.

Todos sabemos la actitud, acertada a veces, o equivocada la mayoría de las veces, que las izquierdas y las derechas han venido poniendo en práctica a lo largo de siempre, desde el siglo XIX, por no irnos más atrás. Alguien tiene que empezar a corregir el rumbo. Alguien tiene que pensar que así no podemos continuar. Alguien tiene que tomar la iniciativa de estudiar la situación, reconocer los errores, y lanzarse a crear una corriente de opinión que aclare el panorama político de España. Menos lamento, y más medidas. Medidas que tienen que pasar por una ideología clara, y una estrategia positiva, una estrategia que logre el objetivo de llegar a la gente.





No hay comentarios:

Publicar un comentario