A PACO NAVARRO

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Educación para el siglo XXI   (12)

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Sabes que llevo varías semanas dedicado a estudiar los distintos modelos educativos en Europa. Pero, lo siento. Esta semana queda aparcado el tema para hacer un paréntesis y dirigirme al profesor Francisco José Navarro Haro, que es, además de amigo, secretario de Educación de la ejecutiva provincial del PSOE. Y lo hago para comentarle, por si no lo has visto, de las declaraciones de la secretaria de Educación del PP en Castilla-La Mancha, Ana González.

Cuando leía las declaraciones de esta señora, me acordé de la reunión que tuvimos la semana pasada, el jueves día 13. Reunión de la Plataforma para la Educación que tú habías convocado. Me vino a la memoria el ingente trabajo que presentaste sobre la Educación. Analizábamos los avances conseguidos en muchos años. Avances y errores. Todo, avances y errores, indispensables, para forjar un proyecto de futuro, que estamos empeñados en diseñar. Falta mucho por hacer, incluido las corrección de los errores. Pero con empeño, trabajo, y sobre todo, con honestidad intelectual se puede conseguir. Podemos, Paco, podemos.

Tú que sabes muy bien el trabajo que cuesta analizar una situación, del tipo que sea, elaborar un estudio, detectar las inquietudes de la sociedad, sacar conclusiones, y confeccionar planes de futuro, ¿qué cuerpo se te queda cuando oyes declaraciones como las de la señora González?. Qué poquitas horas de estudio hacen falta para hacer semejantes afirmaciones. No le ha hecho falta, ni asistir a clase de Educación para la Ciudadanía.

No hay cosa que más me reviente que oír a personas que no tienen ni pajolera idea, que somos los demás los equivocados: que el Guadiana no nace en las Lagunas de Ruidera, que nade en las Tablas de Daimiel. Qué malestar produce después de haber vivido durante muchos años la evolución de nuestros centros públicos, oír…lo que hemos oído. Paco: ¿sabes lo que voy a hacer? voy a escribir un tratado explicando los fundamentos científicos de por qué vuelan los peces y nadan los pájaros. Quizá así consiga los vales suficientes para que me nombren miembro del Consejo Superior de Investigaciones Científicas. ¡Cada uno atesora los méritos que puede!