miércoles, 26 de junio de 2013

MENOS BECAS

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La Educación en España
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Es penoso que te pongan en el disparadero de tener que estar permanentemente desmontando falsedades. No es cierto que la crisis haya llegado porque hemos gastado demasiado en Educación. La Educación no es la culpable. Es la víctima de la crisis; una crisis provocada por corrientes neoliberales económicas y políticas. Esa es la razón de que tengamos que poner coto a la crisis, coto a los abusos del poder financiero, para poder mantener la Educación y todos los demás servicios sociales. Luego no hay que recortar en becas para solucionar la crisis. NO, y mil veces no. Hay que solucionar la crisis; hay que cambiar el modelo económico.

Las becas son un derecho de la sociedad, para dotar a los ciudadanos del principio de igualdad de oportunidades. No son una limosna que les damos, y que por tanto, estemos en condiciones de exigirles más que a los demás. Es una tremenda injusticia exigir un 6,5 a un estudiante becado para que siga “disfrutando” de una beca, para que pueda seguir estudiando. Mientras que otros puedan aprobar con un 5; incluso repetir en algunos casos hasta cuatro veces. Estamos incurriendo, sencilla y llanamente en una discriminación; estamos haciendo una selección de estudiantes; estamos rompiendo las reglas de la universalización.

En el año 2012, han perdido la beca, por culpa de los recortes, 35.000 estudiantes. Y se prevé que en 2013 sean 85.000. Son miles de personas, que se ven privados de un derecho. Eso supone que miles de estudiantes tengan que dejar de estudiar. Los que tienen la suerte de podérselo pagar, pueden seguir tranquilamente ocupando un puesto que el estado subvenciona con un 80 %. El que no puede pagárselo le privamos de utilizar ese 80 % que viene de los impuestos de todos.

A ver si nos enteramos. Qué no se ha despilfarrado. No. Habíamos alcanzado unos niveles de justicia social muy aceptables, y que la crisis se los ha llevado por delante. Por tanto es injusto, e ineficaz, recortar gastos en servicios sociales para acabar con la crisis. Al contrario, lo que hay que hacer es corregir los desaguisados que han provocado la crisis y así poder volver a las prestaciones que habíamos conseguido. Y mientras tanto no exigir a los becados más que a los no becados.



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