Sea por deformación profesional, sea por el entusiasmo que despierta el mundo en el que me he movido siempre, pero sea cual sea la motivación, sigo con mucha atención los cambios en el sistema educativo español en general, y el de Castilla-La Mancha en especial. Estoy orgulloso porque el resultado es altamente satisfactorio. De cuando empecé a trabajar, a estos momentos, la educación, las aulas y los centros, han pasado de ser tercermundistas a estar a la vanguardia de los diferentes sistemas educativos.
Diez años después de recibir las competencias en Educación de la Administración Central, el Gobierno de Castilla-La Mancha presentó en las Cortes un proyecto de Ley que, por una parte, estableciera las líneas maestras de nuestro sistema educativo y, por otra, asegurar los avances que se habían logrado durante esos diez años, y que no han sido pocos. Al menos comparado con otras regiones.
Con datos del año 2010, el gobierno de Castilla-La Mancha invierte en educación próximo a los 2.000 millones de euros. Esta inversión nos coloca a la cabeza de las Comunidades Autónomas acercándonos al 6 % de del PIB en inversión, que es la media en Europa, por encima de la media española. Aclarando que esta inversión está garantizada por la Ley de Educación aprobada en julio de 2010.
Según datos del INE, Castilla-La Mancha ocupa la 6ª posición en cuanto a gasto medio por alumno, con más de 5.500 euros. Muy por delante de Madrid o Valencia, y por encima de la media nacional. El dato es importantísimo porque garantiza una enseñanza pública de calidad, que a su vez garantiza el derecho a la igualdad.
Es importante recordar también que desde que se asumieron las transferencias en materia de educación en el año 2000, se han construido 245 centros nuevos. Esto supone que el 25,5% de nuestras escuelas e institutos los ha edificado el Gobierno Regional en los últimos años, además de realizar 559 ampliaciones importantes o grandes reformas, con una inversión superior a 1.000 millones de euros.
Desde que el Gobierno de Castilla-La Mancha asumiera las competencias en Educación en el año 2000 ha aumentado el número de profesores en 10.700, un 46,6 %. Solo en el curso 2110-2011, y a pesar de la crisis, se han incorporado a nuestras aulas 354 nuevos profesores, se han abierto 22 centros escolares y se han ampliado otros 63. También se han abierto 42 nuevas escuelas infantiles.
Otra de las bases fundamentales de nuestro modelo educativo es la gratuidad de libros de texto. Medida que siguieron algunas comunidades como la de Galicia, y que después la eliminó. Son 200 euros por alumno como media.
Castilla la Mancha cuenta también con una red de 204 centros bilingües en toda la región. En este aspecto estamos muy por encima de muchas comunidades, en número de centros, en calidad de profesorado, en becas para su perfeccionamiento y en constante renovación en sus metodologías.
El Gobierno de Castilla la Mancha ha decidido también ser pionero en la aplicación del Plan Escuela 2.0. Informatizar los centros, extender los ordenadores a los alumnos, dotar de pizarras digitales. En definitiva introducir la innovación en nuestros centros.
Sí. Me siento orgulloso. Cuando empecé a trabajar, todavía en épocas de la enciclopedia Álvarez, no podía ni soñar que algún día iba a ver, lo que hoy estoy viendo.
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