La razón vuelve siempre

 

          La historia nos ha regalado, nos regala, de vez en cuando unos personajes que no sabemos de donde han salido; desconocemos como se han forjado. Personajes nefastos, pero que incomprensiblemente tienen sus seguidores. Por eso disponen de la fuerza suficiente para imponer sus ensoñaciones; terminan imponiéndolas.

         Lo que ocurre, afortunadamente, es que no perduran en el tiempo; la lacra que han dejado, desaparece y la sociedad vuelve a donde estaba antes de su irrupción, incluso mejorando su estatus social. El progreso continúa, aunque en el camino hayan dejado generaciones enteras que han sufrido en sus carnes tales ensoñaciones.

 

Julio García-Casarrubios Sainz

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