Garantía
procesal
Iba a decir que me sorprende, iba a
decir que me entran temblores cuando oigo hablar a Cospedal. Pero no. Qué va.
Es una mujer que ya no sorprende. Ha perdido la capacidad de sorprender. Cuando
una persona, destacada, ha tomado como fórmula hablar sin encomendarse ni a
dios ni al diablo, pierde la capacidad de tomársela en serio.
Ahora resulta que el juicio de la
Gürtel no está teniendo las garantías procesales propias en un estado de
derecho. Después de haber pasado el proceso de instrucción por varios jueces,
por Tribunales Superiores de Justicia, por la Audiencia Nacional y hasta por el
Tribunal Supremo, ahora se da cuenta de que no hay garantías. ¡Sin comentarios!
Julio
García-Casarrubios Sainz
No hay comentarios:
Publicar un comentario